«El sentir general de la profesión es que va a haber mucho concurso y de empresa pequeña», señala Alfredo Sánchez-Rubio, vicedecano del Colegio de Abogados de Zaragoza y especialista en materia mercantil y concursal.

El tejido productivo de Aragón se encuentra anestesiado desde que estalló la crisis del coronavirus, que ha logrado sortear a duras penas y gracias en gran medida al escudo social tejido por el Gobierno. Los avales del ICO, los ertes y la moratoria concursal han hecho que incluso desciendan las quiebras de empresas en el 2020, pero la realidad está en parte enmascarada. Leer más

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